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El Ateneo quiere rendir su particular homenaje al poeta alicantino Juan Gil Albert y queremos ir dando a conocer su poesía apoyando el trabajo que, desde el instituto que lleva su nombre, se ha llevado con éxito el pasado año. Hemos seleccionado en esta ocasión la poesía:

 

EL EXISTIR MEDITA SU CORRIENTE

(1947-1948) Regresando de Buenos Aires a Méjico

A LA VEJEZ

Cual una sombra a veces te insinúas
lejos aún, y a un tiempo deliciosa,
casi como una joven que aportara
un nuevo resplandor. Siento en mi cuerpo
la transparente imagen de ti misma
como un sedoso velo que adormece
bríos y ansias. Vas como hechicera
vertiéndome en la sangre un bebedizo
y dando a mi sonrisa una engañosa
aura primaveral. Qué importa, dices
si en tus cabellos anda floreciendo
una pálida aurora y a tu puerta
hago sonar con férvida llamada
al juvenil discípulo extasiado.

¿Alguna vez brotaron de tu boca
tal caudal de estivales melodías,
ni sentiste en lo hondo de tu pecho
entre los borbotones de la sangre,
abrirse con dominio tan hermoso
tu flor crepuscular? Oye el susurro
con lo que se encrespa el don de la palabra
bajo el suave rocío del ocaso.

Y ante tal persuasión, ¿quién no abandona,
como a un placer postrero que nos tienta,
su vida a esta fiel mano amortiguada
que pule cuanto toca?

EL ATENEO COMO REFERENTE CULTURAL TURÍSTICO

Blas de Peñas, periodista y Socio de Honor del Ateneo

Al cumplirse el pasado año el 165 Aniversario de la Fundación del Ateneo de Alicante, nos damos cuenta de que el paso de ese tiempo nos autoriza a afirmar que el Ateneo no es sólo referente de cultura a secas, sino que tenemos que valorarlo como cultural-turístico. Y para demostrarlo basta saber cómo los turistas que llegan en busca de cultura interior a la pregunta de qué prefieren visitar o ver, siempre citan El Palmeral junto a Elche, el Castillo de Santa Bárbara, el MARQ, y centros o Ateneos donde se exhibe la cultura de la ciudad. Así lo manifiestan viajeros que llegan al puerto de Alicante, disfrutando de sus cruceros a las personas que les hacen encuestas. Porque quieren conocer, además de los lugares típicos de la ciudad, aquellos escenarios donde ellos puedan admirar y conocer una cultura local que les ayude a entender mejor la tierra que visitan.

El Ateneo, por consiguiente, no es sólo patrimonio de sus socios sino que lo es de toda la ciudad y de toda la provincia, ya que tiene detrás un referente cultural-histórico y ostenta parte de ese arte–patrimonio de lo alicantino. Por tanto se merece el trato que nuestras autoridades dan a otros centros que no tienen esa historia.

Fotografía de archivo. Dª Maribel Berná Box y el periodista D. Blas de Peñas, presentando una de las Galas de

n1 dic Gil Albert, de Peñas